Estos son los mejores destinos de Europa para ver las estrellas: tienen cielo oscuro certificado
Estos lugares son perfectos para los cazadores de estrellas. Foto : Dns Dsg (Unsplash)

Estos son los mejores destinos de Europa para ver las estrellas: tienen cielo oscuro certificado

En estos rincones de Europa, el cielo nocturno es tan puro que no te creerás la cantidad de estrellas que podrás ver. Aquí la contaminación lumínica brilla por su ausencia.

Aleks Gallardo | Agosto 19, 2025

Un viejo refrán islandés dice que "quien mira al suelo ve piedras, quien mira al cielo ve historias". Pocas cosas tienen tanto poder para recordarte que eres un simple invitado en el universo como pasar una noche contemplando la Vía Láctea. El problema es que, en la mayoría de ciudades como Madrid con su animada vida nocturna o París con toda su belleza, las estrellas han sido expulsadas del firmamento por culpa de la contaminación lumínica: hay tanta farola y escaparate LED que el cielo se esconde. Lamentablemente, nuestras ciudades favoritas están muy lejos de ser algunos de los mejores destinos de Europa para ver las estrellas.

Aquí es donde entran en juego los sellos Starlight y Dark Sky, que no son nombres de cócteles, sino certificaciones internacionales que garantizan que un lugar ofrece un cielo nocturno limpio, protegido y digno de telescopio. El primero nació en España impulsado por el Instituto de Astrofísica de Canarias, mientras que el segundo es una iniciativa estadounidense con alcance global. En ambos casos, obtener el título implica limitar la contaminación lumínica, promover la observación astronómica y, en muchos casos, fomentar el turismo de estrellas. Y sí: algunos de los lugares más espectaculares están en Europa.

1. Reserva de la Biosfera de Menorca, España

Una de las cosas que suceden al visitar Menorca es que pronto nos damos cuenta de que esta isla no es solo playas tranquilas y caldereta de langosta: desde 2019 es también un Destino Turístico Starlight. La isla entera ha reducido la contaminación lumínica, lo que significa que desde lugares como el Monte Toro o el faro de Cavalleria puedes ver un cielo tan despejado que hasta las constelaciones menores se dejan fotografiar. Si además lo combinas con una noche de brisa marina y silencio, la experiencia roza lo hipnótico.

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Este certificado garantiza la mejor visión estelar en noches sin nubes. Foto: Pexels

2. Parque Nacional de Cévennes, Francia

Francia tiene vino, queso y, por si fuera poco, el mayor parque natural con certificación Dark Sky de Europa. Se trata de Los Cévennes, en la región de Occitania: un paraíso montañoso donde la densidad de población es mínima y la oscuridad, máxima. Desde la cumbre del Mont Lozère, el cielo se abre como un mapa antiguo. El parque organiza noches de astronomía y rutas de senderismo que terminan bajo cielos tan claros que uno entiende por qué Van Gogh pintó esas espirales en La noche estrellada.

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Hazte con una buena cámara para fotografías inolvidables llenas de estrellas. Foto: Pixabay

3. Reserva Starlight de la isla de La Palma, España

Si la Tierra tuviese un balcón al universo, estaría en La Palma. Su ley de protección del cielo nocturno es pionera: limita la iluminación artificial y regula hasta las rutas de los aviones para no interferir con el trabajo del Observatorio del Roque de los Muchachos. A más de 2.400 metros de altura, aquí las estrellas no parpadean: brillan como si estuvieras dentro de un planetario, pero sin techo.

4. Parque Nacional de Hortobágy, Hungría

El cielo húngaro quizá no sea lo primero que te viene a la cabeza cuando piensas en turismo astronómico, pero Hortobágy, la llanura más extensa del país, es Reserva Internacional Dark Sky desde 2011. Sin montañas ni grandes ciudades alrededor, el horizonte parece no tener fin. Es el lugar perfecto para ver la Vía Láctea en toda su extensión o cazar lluvias de meteoros en verano, tumbado sobre una manta en medio del silencio.

5. Snowdonia, Gales

En Snowdonia, la noche se siente como en las novelas góticas: montañas oscuras, lagos que reflejan la luz de la luna y pueblos de piedra donde el único ruido es el del viento. El parque nacional obtuvo el estatus de Dark Sky Reserve en 2015, y desde entonces ha sido un imán para fotógrafos nocturnos. La combinación de paisajes dramáticos y cielos despejados hace que incluso a ojo desnudo puedas identificar nebulosas y cúmulos estelares.

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Prepara tu tienda de campaña, en algunas de estas localizaciones puedes dormir para no perderte ninguna estrella. Foto: Josh Hild (Pexels)

6. Parque Nacional de Eifel, Alemania

A una hora y media de Colonia, Eifel es un ejemplo de cómo un país densamente poblado puede crear un santuario de oscuridad. Aquí se han sustituido miles de farolas por iluminación controlada y se han protegido más de 110 kilómetros cuadrados de cielo nocturno. En sus “Nights of the Stars” organizadas en verano, guías especializados te ayudan a encontrar desde Saturno con sus anillos hasta galaxias lejanas usando telescopios de alta gama.

7. Parque Nacional de Gran Paradiso, Italia

Entre el Piamonte y el Valle de Aosta, Gran Paradiso es el paraíso literal para los amantes del alpinismo… y de la astronomía. Sus picos superan los 4.000 metros y la contaminación lumínica es prácticamente inexistente. En invierno, las noches despejadas ofrecen un espectáculo añadido: el contraste entre la nieve iluminada por la luna y un cielo tachonado de estrellas. No es raro encontrar aquí a astrofotógrafos profesionales que suben cargados con trípodes y cámaras para capturar imágenes de postal.

TURIUM TIPS

Elige fechas sin luna llena: un cielo oscuro con luna brillante es como ir al cine con las luces encendidas.
Abrígate bien: incluso en verano, la temperatura cae en zonas de montaña.
Olvida el móvil (o ponlo en modo avión): tus ojos necesitan al menos 20 minutos para adaptarse a la oscuridad total.
Invierte en unos prismáticos astronómicos: no ocupan tanto como un telescopio y multiplican lo que puedes ver.
Consulta calendarios astronómicos: las lluvias de meteoros como las Perseidas (agosto) o las Gemínidas (diciembre) son un plus.