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Turium entrega su premio Connecting Excellence Award a Antonio Banderas
El galardón, que el actor ha recogido durante el Foro Internacional de Turium, reconoce la labor de que ha realizado como embajador del turismo y excelencia de nuestro país y de la marca España.
A principios de los 90, con poco más de treinta años, Antonio Banderas hizo un viaje de ida a Estados Unidos que se convirtió, gracias al tesón y el talento, en una carrera internacional llena de éxitos. Aquel joven actor es hoy, también, un prestigioso gestor y promotor cultural que acaba de estrenar su último espectáculo, “Tocando nuestra canción”. Un arco de transformación que ya quisieran para sí muchos personajes de ficción. Su trayectoria resulta un inspirador ejemplo de constancia y superación, frente a la cultura de lo efímero y la fama líquida. Además, su indiscutible compromiso con las artes y con la promoción de su tierra dan buena cuenta de lo exitoso que puede ser para los destinos el binomio cultura-turismo.
Has recorrido el globo por tu profesión y, también, como viajero incansable y has sido un gran descubridor de las particularidades de nuestro país. Desde tu punto de vista, ¿qué valores diferenciales crees que tiene España?
La globalidad es una realidad, pero creo que un país con tanta personalidad como el nuestro sigue manteniendo su idiosincrasia y eso es precisamente lo que lo hace más atractivo para el viajero. Aquí van a encontrar paisajes increíbles, unas infraestructuras muy preparadas para recibir turistas, una gastronomía variada y riquísima; y una huella cultural fruto de una historia extraordinaria y de la fusión de fenicios, romanos, visigodos, árabes, judíos…. Y, lo más importante, es que la gente que recibe al extranjero con los brazos abiertos.
En tu opinión, ¿promocionamos lo suficiente a nivel internacional nuestro patrimonio o la diversidad y riqueza de nuestra identidad?
Desde mi ámbito de trabajo siempre tengo presente la dimensión internacional de mis proyectos. Tanto el Teatro del Soho Caixabank, como el Espacio Sohrlin, son un ejemplo de ese interés por promocionar el patrimonio español, más allá de nuestras fronteras. La riqueza y variedad de nuestra cultura es un ejemplo de todo lo que podemos aportar al mundo desde todos los ámbitos: cultura, deporte, ciencia, gastronomía….
Y, en concreto, ¿qué nos hace tan atractivos para ese público americano que tan bien conoces y que es un viajero tan relevante para España?
Sin duda, nuestra historia y cultura. Desde el Museo del Prado, que tiene la mayor concentración de arte de primerísimo nivel por metro cuadrado, a las catedrales repartidas por toda nuestra geografía. Pero, también, una gastronomía imbatible y una oferta vinícola interminable. Y ahora, como nunca antes, una cartelera de espectáculos musicales que han llevado a Madrid a convertirse en la tercera capital de musicales del mundo…
Acabas de recibir el Turium Connecting Excellence Award por tu labor como embajador de la cultura y la excelencia de nuestro país más allá de nuestras fronteras. Después de una vida consagrada a las artes, ¿crees que subestimamos el poder de la creatividad como catalizador de cambio y generador de riqueza?
Sí, siempre se ha asociado la creatividad con nociones menos economicistas y se consideraba todo lo que tenía que ver con ella como algo que pertenece al entretenimiento, más que a la ciencia o a los negocios. Pero está claro que, sin creatividad, empezando por el propio invento de la rueda, el mundo no habría evolucionado. En esta era digital que habitamos, ahora más que nunca, es la capacidad de ser creativos lo que marca la diferencia entre las máquinas y el hombre. Es el motor real del cambio, aplicado ahora sí, a todos los órdenes de la vida.
Desde que iniciaste tu andadura internacional han pasado más de tres décadas, ¿cuáles son las principales diferencias que aprecias en nuestro país desde que saliste rumbo a Hollywood?
La España que yo dejé estaba mudando su piel y cambiando de color. Salía del blanco y negro para dar paso a toda una gama de colores, los de la movida de los 90. El país despertó a una nueva realidad en todos los ámbitos: política, social, educativa, cultural… Esas tres décadas cambiaron completamente la fisonomía de nuestro país.
Una parte importante de esos cambios yo los viví desde otro continente y al no estar aquí, los iba descubriendo cada vez que regresaba. Ahora sí vivo en España, aunque viaje constantemente, y por tanto estoy inmerso en el día a día y formo parte también de la ciudadanía que provoca y padece esos cambios. Algunos a mejor y otros no tanto… Pero, indudablemente, es una España muy diferente a la que yo dejé.
¿Qué le dirías a los jóvenes cuyos referentes aspiracionales están en plataformas de contenidos virales?
Que lograr el éxito o alcanzar los sueños que se persiguen no se logra desde lo efímero o lo superficial. Hay que trabajar muy duro y focalizar la atención en aquello que uno quiere lograr. Es peligroso educar a los jóvenes en la cultura de lo inmediato porque todo se consigue con esfuerzo y perseverancia. Hay que dedicar tiempo a las cosas, profundizar en el aprendizaje y ser conscientes y constantes, en aras del trabajo bien hecho. Esa es mi máxima, sino hago las cosas buscando la excelencia, prefiero no hacerlas. El Teatro del Soho Caixabank, mi proyecto más vital, es exactamente eso, la búsqueda del éxito a través de la excelencia.
El actor de 32 años que debutó a nivel internacional con “Los reyes del Mambo” es hoy, en su Málaga natal, un activo gestor cultural. ¿Qué esperas del ambicioso proyecto Sohrlin Andalucía con el que estás tan profundamente implicado?
Es un proyecto que se está gestando y que creo va a ser un antes y un después para la oferta cultural de Málaga, de Andalucía y de España. Domingo Merlín, un profesional muy reconocido en el ámbito de los grandes espectáculos, es mi otra mitad en esta aventura, que pretende recuperar el singular espacio de una antigua fábrica delante del mediterráneo. La idea es dedicarlo a la creación, producción, entrenamiento, formación, exhibición y distribución de las artes escénicas y el entretenimiento cultural con proyección internacional. Es muy ambicioso, ya que será motor de la industria del entretenimiento y, a la vez, cantera, pues formará a los jóvenes en los oficios de las artes escénicas y visuales.
Hasta hace poco el foco estaba puesto en traer los grandes musicales de Broadway. Hoy, con iniciativas como el Teatro Soho Caixabank, el objetivo es que el público americano venga a ver las producciones que hacemos aquí. ¿Cuál será la fórmula del éxito para atraer una audiencia tan experta en grandes producciones teatrales?
Madrid ha recibido una avalancha de producciones musicales con los grandes clásicos de Broadway y otros nuevos libretos. Todos ellos han convivido y han creado una oferta increíble para el público. Nuestra propuesta desde el Teatro Soho Caixabank ha sido apostar por recuperar algunos de los musicales más reconocidos de la historia, como es el caso de “A Chorus Line” o “Company”. Siempre buscamos proyectos que sean icónicos.
Acabas de estrenar “Tocando nuestra canción”... ¿Qué te ha enamorado del libreto para adaptarlo y dirigirlo?
Es una apuesta por mirar las relaciones de pareja en clave de comedia, pero los personajes de la historia, poco a poco, revelan sus pequeñas tragedias, sus fobias, sus deseos y el uso que estos hacen del humor como mecanismo de defensa. Neil Simon, Marvin Hamlisch y Carole B. Sager, libretista, compositor y letrista respectivamente, nos proponen una narrativa cargada de dulce ironía e inteligencia a través de la cual vamos desmembrando la personalidad de dos seres humanos. Un hombre y una mujer, que viajan por su existencia con los bolsillos llenos de amor y desamor, dispuestos a enfrentarse a sus poderosos miedos, desdoblándose y multiplicándose para sugerir que, quizás, todos nosotros somos diferentes posibilidades frente a diversos caminos y opciones. Es un homenaje, un tributo, a una forma de contar historias que invadió las pantallas de cine y nuestros corazones durante las décadas de la comedia romántica norteamericana.
Eres una persona tan dinámica que estoy seguro que ya estás embarcado en nuevos proyectos. ¿Qué será lo siguiente?
Sí, queremos estrenar, probablemente, en otoño “Gypsy”, una de las obras más lauredas en los premios Tony, basado en las memorias de la artista y vedete Gypsy Rose. Estará protagonizado por Marta Ribera, con dirección musical de Arturo Díez Boscovich. El espectáculo contará con la mayoría de las coreografías originales de Jerome Robbins, uno de los grandes coreógrafos y directores de la historia de musicales, como “West Side Story” o “El violinista en el tejado”. Es uno de los mejores musicales estadounidenses de todos los tiempos.
Situada en la localidad palentina de Baños de Cerrato, la iglesia de San Juan de Baños es considerada la más antigua de España, así como una de las más bonitas.