Estas islas son el país menos conocido y más bonito del mundo: están rodeadas de volcanes y cascadas
La cascada de Múlafossur, en las Islas Feroe. Foto : Unsplash.

Estas islas son el país menos conocido y más bonito del mundo: están rodeadas de volcanes y cascadas

Entre Reino Unido, Noruega e Islandia encontramos las Islas Feroe, un país que no conoce nadie, pero que puede presumir de ser uno de los más bonitos del mundo

Lucía Lorenzo | Mayo 21, 2025

Los océanos ocupan más del 70% de la superficie de la tierra y, en medio de la inmensidad, hay miles de islas. Entre ellas, se encuentran las Islas Feroe: un destino escondido en el corazón del Atlántico Norte, desconocido para muchos. Ubicadas entre Islandia y Escocia, estas islas, bañadas por las mareas y rodeadas de imponentes volcanes, no solo ofrecen paisajes de una belleza indescriptible, sino también una rica cultura vikinga que sigue viva en sus tradiciones. Si alguna vez has soñado con conocer un lugar lejano, con un entorno salvaje y una naturaleza en su estado más puro, este es el destino perfecto.

Así son las Islas Feroe, el país más bonito del mundo

Antes de aterrizar en las Islas Feroe, pongamos un poco de contexto. Este archipiélago formado por dieciocho islas forma parte de un territorio autónomo dentro del Reino de Dinamarca. Y, aunque el turismo de masas aún no ha llegado hasta aquí, su encanto y belleza natural son inigualables. Los paisajes combinan montañas escarpadas, acantilados vertiginosos y una costa marcada por las mareas que se ven arrastradas por las corrientes del océano Atlántico.

Lo que más sorprende de las Islas Feroe es su naturaleza salvaje y, por supuesto, ese paisajismo que da lugar a vistas espectaculares. La tierra, de origen volcánico, está llena de valles profundos, montañas cubiertas de musgo y césped verde brillante. Los pueblos, pequeños y pintorescos, están rodeados por verdes praderas, lo que hace que este territorio no solo sea de una belleza inabarcable, sino también tranquilo y apacible.

A menudo, los viajeros se sorprenden al descubrir que aquí la vida se ha adaptado a la perfección a las condiciones extremas. Las viviendas tradicionales están hechas de madera con tejados de hierba. Esta curiosa característica no es casual, sino que sirve para asilar las viviendas de la humedad, producto de las constantes lluvias que asolan el territorio.

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Las casas tradicionales de las islas Feroe tienen tejados cubiertos de hierba. Foto: Unsplash.

Todo aquí es reflejo de una cultura que ha aprendido a convivir con el clima: con los intensos vientos, las tormentas y la oscuridad de los largos inviernos. A pesar de su aislamiento, las Islas Feroe son un lugar donde la vida fluye en armonía con el entorno natural, y sus habitantes siguen preservando costumbres que se remontan a tiempos vikingos.

Qué ver y qué hacer en las Islas Feroe

Si hay un lugar que tienes que visitar sí o sí, ese es Tórshavn. La capital de las Islas Feroe es una pequeña joya llena de encanto, con calles empedradas y coloridas que rebosan de vida local. Aquí puedes ver una curiosa mezcla de edificios de colores y casas rojas, de estilo tradicional, con techos de césped.

El puerto es el lugar ideal para relajarte mientras observas las embarcaciones de pescadores, tras un día caminando por la ciudad. Pero antes, dirígete al Museo de arte de las Islas Feroe, donde podrás descubrir la historia del arte feroés y disfrutar de las mejores obras de sus artistas contemporáneos. Y si quieres saber más sobre la cultura del lugar, pásate por el Museo Nacional de las Islas Feroe, lleno de objetos curiosos que narran la historia del archipiélago.

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En la isla de Vágar, a una hora aproximadamente de la capital, se encuentra uno de los lugares más fotografiados del país. Hablamos de Gásadalur, un pequeño pueblo, famoso por sus paisajes, donde se encuentra la famosa cascada de Múlafossur. Esta altísima catarata no es como las demás, pues el agua cae directamente al mar, creando un espectáculo difícil de olvidar.

También merece la pena visitar la isla de Mykines, especialmente si eres amante de las aves. Esta pequeña isla es hogar de una de las colonias más grandes de frailecillos en las Islas Feroe. Este es un lugar para desconectar, donde podrás caminar por senderos espectaculares que ofrecen vistas impresionantes de los acantilados y las aves en su hábitat natural. Si necesitas olvidarte del bullicio y las prisas, este es tu lugar.

TURIUM TIPS

Una de las mejores formas de explorar las Islas Feroe es mediante un paseo en barco por los fiordos. Estas excursiones te permiten admirar la belleza de los acantilados, las islas rocosas y los paisajes marítimos que rodean el archipiélago. La sensación de estar rodeado de agua por todos los lados, mientras se disfruta de la tranquilidad del mar, es una experiencia única.
Las Islas Feroe son un destino de ensueño para los amantes del senderismo. Desde las rutas suaves a lo largo de las costas, hasta los desafiantes recorridos por las cumbres más altas, hay opciones para todos los niveles. No te pierdas el recorrido hacia el monte Slættaratindur, el pico más alto de las Islas Feroe, desde donde tendrás una vista panorámica increíble del archipiélago.
Visita la isla de Kalsoy y su famoso faro. Conocida como la isla de las estrellas, Kalsoy es famosa por el faro de Kallur. Aunque el sendero que lleva hasta el faro es empinado y desafiante, las vistas panorámicas del océano y las islas cercanas hacen que el esfuerzo valga la pena.