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La muralla romana mejor conservada está en España y es un bien Patrimonio de la Humanidad único en el mundo
La muralla romana de Lugo fue construida en el siglo III d.C y su buen estado de conservación hace que sea única en el mundo.
Galicia es una región vibrante, llena de cultura, de pueblos con encanto y de playas espectaculares. Desde el Puente Romano de Orense hasta la Torre de Hércules, que vigila el océano Atlántico desde las alturas, aquí se respira historia por los cuatro costados. Los romanos pasaron cien años apostados en estas tierras, donde el verde del campo se funde con el azul del mar. A día de hoy, aún resisten algunas pruebas de su paso por la comunidad, y los gallegos pueden presumir de tener en su territorio la muralla romana mejor conservada del mundo.
Aunque a día de hoy aún hay mucha gente que piensa que las mejores ruinas romanas están en Italia, lo cierto es que España no se queda atrás. La muralla romana de Lugo fue nombrada Patrimonio de la Humanidad en el año 2000 por su importancia histórica y su impresionante estado de conservación. No se puede negar que esta atalaya, que fue levantada para defender la ciudad de Lucus Augusti de los atacantes, ha cumplido con creces su función. Dieciocho siglos después de su construcción, su estructura resiste intacta, ajena al paso del tiempo.
Todo sobre la muralla romana mejor conservada del mundo
Con dos kilómetros de longitud, 10 puertas y 85 torreones, la muralla de Lugo protege el casco antiguo de la ciudad. Si bien no es tan conocida como el Acueducto de Segovia, el teatro romano de Mérida, es probablemente la construcción romana mejor conservada de todo el territorio español.
Su longevidad no se debe solamente a la firmeza de las piedras de granito y pizarra con las que fue construida. Para mantener la estructura de esta obra maestra de la ingeniería militar romana se han necesitado realizar constantes trabajos de mantenimiento y restauración. No obstante, el grosor de sus muros, que alcanzan los cuatro metros de ancho, también ha contribuido a que se mantenga entera.
Aunque bien conservada, la fortificación vive en completo equilibrio con la ciudad. De hecho, es posible caminar sobre sus muros de forma completamente gratuita y, cada día, pasan miles de personas bajo sus arcos. De sus diez entradas, la Puerta de Santiago, la de San Pedro, la Puerta Miñá, la Porta Nova y la Puerta Falsa ya existían en época romana. El resto se abrieron a medida que la ciudad crecía.
De sus puertas, la Porta Miñá es la única que se conserva sin haber sufrido apenas modificaciones. La última, que lleva el nombre del Obispo Odoario, se construyó en 1921. El hueco, abierto con motivo de la construcción el Hospital de Santa María, fue realizado por orden del alcalde dinamitando la muralla. No obstante, este suceso no estuvo exento de polémica: como la puerta se abrió sin permiso, el Estado español aumentó su protección declarándola Monumento Nacional.
Qué ver en el casco histórico de Lugo
La muralla romana mejor conservada del mundo guarda el casco histórico de la que es la ciudad más antigua de Galicia. Entre las altas paredes de piedra encontramos la preciosa Catedral de Santa María de Lugo, un edificio de estilo románico que data del siglo XII. Junto a ella, se encuentra la Torre Vieja, anterior a la catedral y de estilo gótico.
Otro de los edificios más importantes de la ciudad es el Círculo de las Artes. Construido por el arquitecto Luis Bellido e inaugurado en 1898, en cuyo interior destacan preciosas salas como el Salón de las Columnas o la Sala Bacabú. La construcción se encuentra en una esquina de la Plaza Mayor, donde también se encuentra el Pazo do Concello, o Ayuntamiento, de estilo barroco.
También en el centro se encuentra la Plaza de Ferrol, donde se pueden ver los restos romanos del antiguo Acueducto de Lugo. Además, también puedes visitar el Pazo de San Marcos, un imponente edificio de dos plantas con fachada simétrica donde a día de hoy se encuentra la sede de la Diputación de Lugo.
Muy cerca se encuentra la Plaza de Santo Domingo, que alberga la iglesia de Santo Domingo, construida en el siglo XIII, y el Monumento do Bimilenario: una altísima columna coronada por un águila que se construyó en el 2.000 aniversario de la ciudad.
TURIUM TIPS
Si te interesan las construcciones romanas, no dejes de visitar el Conjunto Arqueológico de Santa Eulalia de Bóveda. Situado a 14 kilómetros de Lugo, destaca por las pinturas de su interior, que representan diferentes tipos de aves.
Alójate en el Hotel Balneario de Lugo, donde se conservan los restos de un antiguo balneario romano declarado Monumento Histórico Artístico Nacional.
Si te gusta la comida tradicional gallega en su versión más casera, reserva en el Restaurante A Lareira, especializado en pulpo a feira y pulpo con cachelos.
