
Descubre Bokod, el pueblo húngaro que flota sobre un lago espectacular
Si buscas una escapada diferente, un lugar donde la naturaleza, la historia y lo insólito se dan la mano, Bokod es una joya por descubrir: un pueblo flotante difícil de olvidar.
Hungría es un destino que cada vez recibe más visitantes, donde la historia se deja bañar por las aguas de los balnearios de Budapest y la arquitectura clásica sorprende en cada rincón. Y justo en el corazón del país, a poco más de una hora de la capital, se esconde uno de sus secretos mejor guardados: Bokod, un pequeño pueblo que parece sacado de un cuento. Sus casas flotan alineadas a lo largo de pasarelas de madera y descansan sobre un lago que nunca se congela. Ni siquiera en los inviernos más fríos. ¿Buscando un destino único y poco conocido? Entonces Bokod te va a sorprender.
Así es uno de los lugares más bonitos de Hungría
A diferencia de las ciudades más visitadas de Hungría, Bokod es un lugar tranquilo, auténtico y rodeado de naturaleza. Permanece alejado del ruido y del ajetreo, sumido en una atmósfera que roza lo mágico. Además de su lejanía del bullicio, lo que lo hace especial es el Lago Bokodi, un embalse artificial creado en los años 60, cuyo propósito original era refrigerar una central térmica.

Justo por ese motivo, las aguas se mantienen calientes durante todo el año, lo que impide que se congele incluso en pleno invierno y crea un efecto hipnótico, especialmente en los meses de frío. Entonces, del lago se eleva un vapor suave que envuelve las pasarelas y las casitas, creando un paisaje que parece salido de una postal nórdica. Esta rareza climática ha convertido a Bokod en un destino fotogénico.
Poco a poco, a medida que se ha corrido la voz, el pueblo ha ido ganando popularidad en las redes sociales gracias a las impresionantes imágenes de sus casas de pescadores, que flotan sobre el embalse, conectadas por estrechas pasarelas de madera. Aunque muchas de estas casitas son propiedad privada, hay caminos públicos que te permiten pasear entre ellas y disfrutar de las vistas.
Qué ver en Bokod
Si llegas hasta aquí, lo primero que tienes que ver es el Lago Bokodi. Está en el corazón del pueblo y es su principal atractivo. Puedes caminar por los senderos que rodean el lago y las pasarelas que se adentran en el agua. Lo mejor es ir temprano por la mañana o al atardecer, cuando la luz transforma el paisaje en un espectáculo de reflejos y colores cálidos.
Además, las pequeñas cabañas construidas sobre pilares hacen de este un lugar de cuento. Fueron originalmente usadas por pescadores y, a través de las ventanas, se puede intuir la decoración tradicional y ese encanto rústico que enamora. Aunque no se pueden visitar por dentro, el simple hecho de verlas desde los caminos es una experiencia que merece la pena.
Pero el atractivo de este rincón mágico no acaba aquí. Bokod se encuentra rodeado de bosques y naturaleza viva, lo que lo convierte en un lugar perfecto para quienes buscan desconectar. Puedes hacer rutas de senderismo, observar aves o simplemente sentarte junto al agua con un buen libro.
Sin embargo, te recomendamos no conformarte solo con este pequeño pueblo. Al fin y al cabo, Hungría es un país precioso, lleno de joyas desconocidas como Oroszlány, la ciudad más cercana, donde puedes probar la gastronomía tradicional e incluso visitar algún que otro museo.