Guía de Ámsterdam: todo lo que necesitas saber para viajar a la capital de los Países Bajos
Llena de cultura y cruzada por el río Ámstel, Ámsterdam destaca como una de las ciudades más visitadas de Europa. En esta guía te contamos todos los secretos de la ciudad de los canales donde vivió Van Gogh.
Es una de las ciudades más visitadas de Europa, y no nos extraña. Está llena de canales, aunque no es ni Venecia ni Aveiro, y atesora lugares tan emblemáticos como el Museo Van Gogh o la Casa de Ana Frank. Con nuestra Guía de Ámsterdam podrás visitar una de las capitales europeas más bonitas sin perderte nada. ¿Estás preparado para probar sus stroopwafels y pasear por sus calles repletas de historia? Acompáñanos.
Los lugares más importantes que ver en Ámsterdam
Llena de museos, rincones históricos y paisajes de ensueño, si empezásemos a enumerar todo lo que tienes que ver en la capital de los Países Bajos, no terminaríamos jamás. ¿Quieres saber cuáles son los sitios completamente imprescindibles? ¡Te lo contamos!
Museo Van Gogh
Si alguien ha dejado huella en Holanda, ese es Vincent van Gogh. A pesar de que su estancia en la ciudad de los canales fuese extremadamente breve, su sombra se extiende por cada rincón de la metrópolis, y es especialmente intensa en el museo dedicado a su figura .
La pinacoteca destaca por albergar en su interior la mayor colección de obras del artista neerlandés. En su interior, encontramos más de 200 pinturas, unos 500 dibujos y cientos de cartas del pintor, en un recorrido que suele durar una hora y cuarto.
El precio de la entrada es de 36,25 € con audioguía y 32,50 € sin audioguía, aunque es gratuita hasta los 17 años. El museo abre todos los días, en horario de 9:00 a 17:00 o 18:00 en función de la temporada.
Rijksmuseum
Aunque muchos se conforman con visitar el Museo Van Gogh, el Museo Nacional de Ámsterdam es una visita obligada para aquellos que disfrutan del arte de todas las épocas y en todas sus formas. Aquí, en concreto, destacan especialmente las piezas elaboradas durante el Siglo de Oro neerlandés, aunque también destaca el pabellón asiático y la colección de arte egipcio.
Las entradas cuestan 25 € para los adultos, aunque son gratuitas para los menores de 18 años. Puedes visitarlo todos los días entre las 9:00 y las 17:00.
Casa de Ana Frank
Ana Frank, la niña neerlandesa de ascendencia judía que falleció en el campo de concentración de Bergen-Belsen, pasó ocho años en Ámsterdam. Fue allí, en el rincón que se ocultaba tras una estantería de su vivienda, donde ella y su familia se escondieron durante casi dos años, y donde ella escribió el testimonio que más tarde estremecería al mundo entero.
Hoy día, el edificio en el que vivieron ocultos se ha convertido en un museo centrado tanto en la vida de los Frank durante el régimen nazi, como en un espacio dedicado a poner de relieve los horrores cometidos por el mismo. El horario de apertura es de lunes a domingo entre las 9:00 y las 22:00, y el precio de la entrada es de 16 € para los adultos, 7 € para jóvenes de entre 10 y 17 años y 1 € para niños de entre 0 y 9 años.
Canales de Ámsterdam
Si por algo es conocida Ámsterdam es por ser la Venecia del Norte: una ciudad con más de 100 kilómetros de canales, que puede recorrerse tanto a pie de calle, como por agua. Las casas flotantes, los puentes y el sinfín de terrazas que descansa a la orilla del agua le dan un encanto especial a la capital holandesa.
Y si cuentas con algo de tiempo, no te limites a verlos: date un paseo en barco por el icónico canal de Singel, embárcate en un romántico crucero nocturno con degustación incluida y, por supuesto, curiosea en el interior de algunas de las casas flotantes que a día de hoy funcionan como museos de la ciudad.
Vondelpark
Teniendo en cuenta que los Países Bajos son conocidos por su compromiso con la sostenibilidad, no es de extrañar que uno de los lugares más visitados de Ámsterdam sea Vondelpark: un gran pulmón verde que se extiende a lo largo de más de 40 hectáreas y donde es común pasear, correr e incluso hacer pícnics, si el clima está de tu lado.
No esperes encontrarte un oasis de tranquilidad: el parque recibe unos 10 millones de visitantes cada año, y precisamente su ajetreo es parte de su encanto. Es fácil llegar, pues se encuentra en el centro de la ciudad, y si tienes suerte quizás puedas disfrutar de un concierto o alguna que otra obra de teatro al aire libre.
Palacio Real de Ámsterdam
Emblema del clasicismo holandés, el Palacio Real de Ámsterdam dista mucho de ser una de esas construcciones que recuerda un tiempo que ya pasó, pues la familia real holandesa lo sigue utilizando, pese a que pueda visitarse durante la mayor parte del año.
Fue construido por los arquitectos Jacob Van Campen y Daniël Stalpaert a mediados del siglo XVI, durante la Edad de Oro neerlandesa. En la actualidad, es la sede de galardones como los Premios Reales de Pintura o el Premio Príncipe Claus. El horario de visita es de lunes a domingo, entre las 10:00 y las 18:00, y el precio de la entrada es de 13,50 €.
Mercado de las Flores
Llamado Bloemenmarkt en holandés, el Mercado de las Flores se encuentra sobre el canal de Singel, flotando sobre sus aguas. Su origen está en el siglo XIX, cuando los vendedores de flores llevaban sus productos desde la periferia hasta el centro. A día de hoy, además de flores, puedes comprar todo tipo de souvenirs y productos artesanales.
Aunque puedes visitarlo todos los días de la semana, te recomendamos acudir de lunes a sábado, pues lo más probable es que el domingo encuentres algún que otro puesto cerrado.
Cómo llegar a Ámsterdam
La forma más sencilla de viajar a Ámsterdam desde España es mediante un vuelo directo desde alguno de los grandes aeropuertos del país: Madrid-Barajas, Barcelona-El Prat, el Aeropuerto Internacional de Sevilla o el Aeropuerto de Málaga - Costa del Sol. Se trata de vuelos de unas 3 horas de duración, que puedes llegar a conseguir por menos de 40 €.
Además, el Aeropuerto Schiphol está a unos 15 minutos en tren de la estación central de Ámsterdam, por lo que puedes llegar de manera fácil y rápida al centro de la ciudad.
Aunque es una opción más lenta y trabajosa, también puedes trasladarte en tren: para ello, tendrías que viajar primero hasta París y después desplazarte desde la capital francesa hasta los Países Bajos.
¿Qué tarjetas turísticas hay en Ámsterdam?
En Ámsterdam, al igual que en la mayoría de las capitales europeas, puedes encontrar tarjetas turísticas que te permiten visitar los principales lugares de interés turístico de la ciudad y desplazarte en transporte público con un descuento interesante.
La más conocida en este caso es I Amsterdam City Card, que te ofrece transporte público ilimitado y gratuito, así como la entrada a los principales museos y otras atracciones (en total, más de 70) durante 24, 48 o 72 horas, dependiendo de la tarifa que elijas. Incluye, entre otros, entrada al Rijksmuseum, a la Casa Museo de Rembrandt, al Museo histórico de Ámsterdam y el zoo de la ciudad, así como un paseo gratuito por los canales.
Otra opción es la Go City Amsterdam, que incluye entrada gratuita a unos 40 lugares de interés de la ciudad, y que dispone de opciones para 1, 2, 3 o 5 días desde 89 €. Sin embargo, no incluye acceso al transporte público.
Rutas y excursiones recomendadas desde Ámsterdam
Aunque la capital holandesa tiene lugares de interés de sobra para visitar, en los alrededores encontrarás algunos rincones secretos, como el desconocido pueblo lleno de canales de Giethoorn, que sin duda merece la pena visitar:
Excursión a los Molinos de Zaanse Schans
A media hora de Ámsterdam, encontramos una de las postales más fotografiadas de los Países Bajos: los molinos de viento de Zaanse Schans, en el municipio de Zaanstad. Este museo al aire libre se encuentra a orillas del río Zaan y es el lugar ideal para conocer la historia de una región que fue uno de los motores económicos del país durante más de tres siglos.
Además de por su pasado industrial, la zona de Zaanse Schans destaca por ser el lugar donde se encuentra la Granja de Queso Catharina Hoeve, donde podrás degustar multitud de quesos holandeses y de donde te marcharás, sin duda, con buen sabor de boca.
Visita a los Campos de tulipanes de Keukenhof
Entre Hillegom y Lisse, a unos 40 minutos en coche desde la capital, se encuentra el parque de Keukenhof: un lugar conocido por sus extensísimos campos de tulipanes, que se extienden hasta el horizonte en un sinfín de caminos coloridos.
Su nombre significa “jardín de la cocina”, debido a que durante el siglo XV fue el lugar donde el personal del castillo de Jacqueline de Baviera cazaba y recogía hierbas aromáticas. A día de hoy, se encuentra entre los jardines más famosos del mundo, y teniendo en cuenta su belleza no nos extraña.
Paseo en barco por los canales
No es necesario salir de la ciudad para disfrutar de la belleza de uno de los países más deslumbrantes de Europa. Basta con recorrer el casco histórico para quedar prendado y, ¿qué mejor manera de hacerlo que a bordo de un barco?
Los recorridos parten desde el canal Herengracht, rodeado de casas señoriales y tiendas de lujo, hasta el canal de Prinsengracht, desde donde se ven lugares como la casa de Ana Frank o el Palacio de la Justicia.
Dónde hospedarse en Ámsterdam
Si bien Ámsterdam no es una ciudad muy grande, es importante elegir bien la zona donde alojarse para perder el menor tiempo posible en desplazamientos. Por eso, lo más recomendable es reservar habitación en el centro.
Sin duda, la mejor opción es alojarse en la Plaza Dam: rodeada de los monumentos más importantes y los mejores hoteles, es el punto de partida perfecto para cualquier ruta turística. Más allá de las construcciones de la propia plaza (la Iglesia Nueva, el Palacio Real o el Monumento Nacional, por ejemplo), desde aquí es fácil llegar a pie a lugares de interés como la Casa de Ana Frank o el Museo de Rembrandt.
Muy cerca, aunque con alojamientos bastante más económicos a su alrededor, se encuentra la Estación Central: aquí tendrás conexión con el aeropuerto, con diferentes partes de la ciudad y, además, seguirás estando bastante próximo a los museos y monumentos importantes.
TipTurium
Si buscas alojarte en una zona céntrica, pero económica, los alrededores de la Estación Central son el lugar perfecto.
Sin embargo, si lo que buscas es una zona tranquila, elige un barrio residencial como Jordaan, a tan solo quince minutos a pie del centro.
Los mejores hoteles de Ámsterdam
La capital de los Países Bajos recibe millones de turistas al año, por lo que la oferta hotelera es muy competitiva. Si no sabes dónde alojarte, te contamos cuáles son los mejores hoteles de Ámsterdam:
Platos típicos de Ámsterdam que debes probar
Entre las comidas más típicas de los Países Bajos encontramos platos como el rookworst: una salchicha ahumada que suele comerse acompañada de un estofado llamado stamppot, que suele prepararse con patata, col y carne.
Aunque si por algo destaca Ámsterdam, es por su comida callejera: desde pescado en escabeche hasta las míticas kroket rellenas de ragú de carne, pasando por las icónicas bitterballen, que se parecen a las croquetas, pero suelen estar rellenas de carne, y los stroopwafels, un gofre con caramelo que se ha convertido en el postre holandés por excelencia.
Los mejores restaurantes de Ámsterdam
¿Quieres disfrutar de la comida holandesa? Estos son nuestros restaurantes recomendados en Ámsterdam:
Locals, el mejor sitio para desayunar
Si tu comida favorita del día es el desayuno, Locals es el lugar ideal para ti: su concepto de all day brunch hace que puedas disfrutar de platos a medio camino entre un desayuno contundente y una comida ligera en cualquier momento del día, y su café de especialidad hará que te quieras quedar resguardado con una taza humeante en las manos.
Es posible que tengas que esperar, pero una vez pruebes sus huevos revueltos con trufa o sus huevos benedictinos, te darás cuenta de que hacer cola ha merecido la pena.
Albert Cuyp Market, perfecto para probar comida típica
Si por algo destaca la gastronomía holandesa es por sus snacks: desde cremosas croquetas hasta pescado frito, pasando por sus famosos gofres. Para nosotros, el sitio donde probar los platos tradicionales es Albert Cuyp Market.
Con más de 250 puestos, aquí podrás encontrar artesanía y prendas únicas. Pero si por algo destaca es por la comida: arenques crudos, unas pequeñas tortitas llamadas Poffertjes y las icónicas patatas fritas son tan solo algunas de las delicias que podrás degustar aquí.
Los mejores stroopwafels en Lanskroom Bakery
Si le preguntas a un holandés donde probar el postre más típico del país, seguramente mencione Lanskroom Bakery. Este lugar es famoso por sus enormes stroopwafels, hechos al momento.
Se trata de un negocio familiar que lleva funcionando durante cuatro generaciones, por lo que la calidad está más que asegurada. Además, a diferencia de otros lugares donde puedes conseguir este dulce tradicional, el local cuenta con un salón de té donde sentarte a degustar sus elaboraciones.
TURIUM TIPS
Si te gusta la cerveza, entonces tienes que visitar la antigua fábrica de Heineken en Ámsterdam. Aquí podrás conocer más sobre la ciudad, pero desde una perspectiva diferente: a través de la historia de una de las marcas de cerveza más populares del mundo entero. Además de seguir el proceso de elaboración de este brebaje, al final de la visita podrás disfrutar de dos consumiciones con o sin alcohol.
Los amantes del arte moderno y contemporáneo no pueden marcharse sin visitar Moco Museum, donde podrás disfrutar de experiencias inmersivas y admirar la obra de artistas como Banksy, Basquiat o Haring, dentro de una casona de principios del siglo XX al más puro estilo holandés.
Si te alojas en Anantara Grand Hotel y visitas la ciudad en primavera, puedes realizar una visita privada a los campos de tulipanes, recoger un ramo de flores frescas y disfrutar de un pícnic en uno de los rincones más bonitos del mundo.