Esta es la ciudad favorita de la Generación Z para visitar en invierno: te contamos por qué los jóvenes adoran París

Cuando el aire empieza a enfriarse y las hojas doradas caen junto a los restaurantes del Río Sena, París se transforma en un lugar idílico. Justo en ese momento entendemos por qué la llaman la Ciudad de la Luz, cuando los rayos del sol se cuelan entre las copas de los árboles e iluminan las hojas doradas del cielo. Y también entendemos por qué se ha convertido en el destino favorito de la Generación Z para este invierno.

Ese ha sido el resultado de una investigación llevada a cabo por Airbnb. La compañía líder de alquileres vacacionales se ha basado en las búsquedas realizadas por sus usuarios de cara al último trimestre del año y los datos hablan por sí solos: la capital de Francia está de moda entre los jóvenes.

No es el único estudio que constata estos datos. Un informe publicado por Accor, en colaboración con Globetrender, situó París en el segundo puesto de los destinos que la Gen Z planeaba visitar durante 2025, solo por detrás de Londres. Además, la misma publicación confirmó que sigue siendo la ciudad más visitada del mundo. Y recientemente, la revista Time Out encuestó a más de 18.500 jóvenes para saber cuáles eran sus ciudades favoritas en Europa; los resultados situaban a esta entre los cinco primeros puestos.

Este es el mejor momento para visitar París

Si lo que quieres es vivir la Ciudad de la Luz con calma y autenticidad, los últimos meses del año son el momento perfecto. Hay menos aglomeraciones, el calor no es un problema y los vuelos y alojamientos son algo más asequibles. En otoño e invierno, la capital francesa ofrece historia, arte urbano, cafés con encanto y avenidas poco concurridas.

Esta combinación no ha pasado desapercibida para la Generación Z, cuya forma de viajar es diferente a la de sus predecesores. Ellos prefieren viajar fuera de temporada, para así reducir costes y tener la posibilidad de alargar los viajes. Una vez en el destino, salen a la caza del lujo asequible, las experiencias con significado y los rincones menos turísticos.

El cambio es especialmente notable en ciudades como París, que en temporada alta se llena de viajeros. Sin embargo, en los meses posteriores hay menos colas. Se respira un ambiente menos turístico, la esencia es más local. Por supuesto, también hay tarifas más bajas que en verano. Y, no nos engañemos, las fotos para Instagram lucen diferentes.

¿El resultado? París muestra su cara más auténtica, lo que resuena con los valores de esta generación.

Por qué París es la favorita de la Generación Z

No nos engañemos. Ya no basta con ver la Torre Eiffel o recorrer los pasillos del Museo del Louvre; cada vez más, cuando viajamos queremos vivir su realidad, conectarnos con su ritmo y sentirnos como un vecino más de la ciudad.

En París, esa mezcla se hace realidad cuando ponemos rumbo más allá del centro, a zonas como Le Marais, Canal Saint-Martin u Oberkampf, que concentran cafés preciosos, tiendas vintage y pequeñas galerías. En las zonas más concurridas, lo mejor es apostar por un enfoque más calmado: caminar por los jardines de las Tullerías o por los puentes del Sena al atardecer, detenerse en una terraza y pedir el café en francés. En definitiva, vivir la ciudad en vez de tachar lugares de una lista.

Quienes saben buscar, encuentran miles de experiencias asequibles que se quedarán grabadas en el recuerdo: desde clases de pastelería francesa hasta talleres de cerámica, sin olvidar los tours por el famoso Marché aux Puces de Saint‑Ouen ni las compras en las tienda vintage de Le Marais.

Claves para disfrutar de París al estilo de la Generación Z

Te damos las claves para vivir París como lo haría la Gen Z, sin prisas, con estilo y con ese afán de descubrimiento que les caracteriza:

Aprovecha la temporada baja, entre enero y marzo.

Alójate en zonas como Le Marais, con alojamientos tan encantadores como Solly Hotel Paris, o Montparnasse.

Busca experiencias alejadas de las zonas turísticas, como asistir a un concierto de Jazz en Gaveau de la Huchette o visitar las exposiciones de Maison Bruneau.

Elige un café histórico, como Au Vieux Paris d’Arcole, muy cerca de la Basílica de Notre Dame.

Y recuerda: puedes disfrutar de los principales monumentos y dejar espacio para rutas menos turísticas que te permitan descubrir la ciudad por tu cuenta, como un auténtico Gez Z.

TURIUM TIPS

Todo el mundo sabe que la calle de las tiendas en París es la Avenida de los Campos Elíseos. Sin embargo, merece la pena caminar por la Rue de Passy, donde se esconden pequeñas boutiques de diseñadores y pastelerías como Desgranges, nuestra favorita de la ciudad.

Uno de los jardines más bonitos de París es el Parque Monceau: un pulmón verde construido en el siglo XVII por orden del Duque de Chartres. Es perfecto para dar un paseo romántico y terminar frente al estanque, rodeado de columnas corintias cuyo origen está en una iglesia de Saint-Denis.

Uno de nuestros sitios favoritos para comer es Bouillon Chartier, en el Boulevard du Montparnasse: un restaurante económico que fue creado para dar de comer a los trabajadores, donde la comida casera brilla con platos como el confit de pato con patatas o el profiterol de chocolate con crema chantilly.