Este es el tren nocturno más espectacular de la Navidad: conecta Helsinki con Laponia
Santa Claus Village. Foto : Alenxandr Bormotin (Unsplash)

Este es el tren nocturno más espectacular de la Navidad: conecta Helsinki con Laponia

El tren nocturno Santa Claus Express une Helsinki con Rovaniemi y se ha convertido en una experiencia única para quienes buscan el auténtico espíritu navideño con eficiencia finlandesa y una dosis de aventura ártica.

Aleks Gallardo | Noviembre 27, 2025

Este viaje que atraviesa Finlandia se mide por kilómetros, pero también por silencios. El Santa Claus Express, que sale cada tarde-noche desde Helsinki rumbo a Laponia, es uno de esos trayectos que no se olvidan. No solo por lo que promete —la llegada al hogar oficial de Papá Noel—, sino porque recupera algo que el turismo moderno ha perdido: la sensación de moverse despacio.

Mientras los vuelos exprés te llevan al norte en una hora, este tren tarda unas doce. Pero esa es la gracia. La experiencia empieza en el andén de la estación central de Helsinki, un edificio art déco diseñado por Eliel Saarinen que resume el carácter finlandés: sobrio, funcional y con un punto melancólico. Desde allí, uno de los mejores destinos nórdicos, las locomotoras de la compañía nacional VR parten hacia un paisaje cada vez más blanco, más silencioso y más salvaje.

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La estación de Helsinki en pleno invierno. Foto: Roman Protsyshyn (Unsplash)

Así es el Santa Claus Express

El Santa Claus Express es un tren nocturno de dos pisos que cubre los 826 kilómetros que separan Helsinki de Rovaniemi, con paradas en Turku, Tampere y Oulu. A simple vista parece un tren moderno, pero su encanto está en los detalles: los compartimentos de madera clara, las mantas gruesas, el olor a metal y nieve que se cuela por las puertas del andén.

Hay varias formas de viajar. La más básica es en asiento reclinable, pensada para trayectos cortos o presupuestos ajustados. Pero si se busca comodidad (y algo de intimidad), las cabinas privadas son la mejor opción: literas compactas, control de temperatura, enchufes, WiFi y, en algunos casos, baño propio con ducha. No son amplias, pero están diseñadas con la precisión de un reloj suizo.

El vagón restaurante, abierto hasta medianoche, ofrece comida sencilla, pero reconfortante: sopas espesas, guisos de reno y cerveza Lapin Kulta. Los camareros se mueven con la misma calma que el tren, y la ventana panorámica es el mejor entretenimiento. En invierno no se ve casi nada —las horas de luz en diciembre son escasas—, pero en verano el sol de medianoche acompaña el trayecto con una claridad que descoloca.

Los trenes son también una apuesta ecológica: según VR, viajar en el Santa Claus Express genera un 95 % menos de emisiones que hacerlo en avión. Un dato que explica por qué cada vez más finlandeses eligen esta ruta, incluso sabiendo que tardarán media jornada en llegar.

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Auroras boreales desde el Santa Claus Express. Foto: Vr

Rovaniemi: ciudad del Ártico y de Alvar Aalto

El amanecer en Rovaniemi llega con una luz azulada que parece filtrada por hielo. La estación es discreta, casi minimalista. Aquí empieza el Ártico: el Círculo Polar se cruza a tan solo 8 kilómetros del centro, en la entrada del Santa Claus Village, el parque donde vive oficialmente Papá Noel. Es un lugar pensado para familias —y para Instagram—, con tiendas, renos, oficina postal y una línea blanca en el suelo que marca el paso al norte absoluto.

Pero la capital de la Laponia finlandesa es mucho más que ese decorado navideño. Rovaniemi, con unos 63 000 habitantes, fue arrasada durante la Segunda Guerra Mundial y rediseñada casi desde cero por Alvar Aalto, el arquitecto más importante de Finlandia. El plano de la ciudad tiene forma de cabeza de reno vista desde el aire, y sus edificios combinan hormigón, luz natural y ese equilibrio entre lo frío y lo cálido tan propio del diseño nórdico.

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Paisaje de Rovaniemi. Foto: Pexels

Uno de los lugares imprescindibles es el Arktikum, un museo semienterrado bajo una bóveda de cristal que explica la vida en el Ártico, la cultura sami y los efectos del cambio climático. A unos pasos, el Korundi House of Culture acoge exposiciones de arte contemporáneo finlandés y conciertos de la Lapland Chamber Orchestra. Y si se busca una experiencia más terrenal, el Roka Street Bistro es el mejor sitio para entender la gastronomía local: cocina moderna con ingredientes árticos como el salmón salvaje, los arándanos o el reno curado.

Por la noche, cuando la temperatura baja de los -20 °C, los locales se refugian en bares de madera y hoteles con saunas panorámicas. Desde el Sky Ounasvaara, en lo alto de una colina, se puede ver la ciudad cubierta de nieve y, con suerte, las primeras auroras boreales de la temporada. Los finlandeses las llaman revontulet, “fuegos del zorro”, porque según la leyenda un zorro ártico agitaba su cola sobre la nieve y lanzaba chispas hacia el cielo.

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Las vistas desde el hotel Sky Ounasvaara. Foto: Lapland Hotels

Qué saber antes de subir al tren

Viajar en el Santa Claus Express no es una experiencia de lujo como puede ser un viaje en el Orient Express, pero sí tiene algo de especial. Es práctico, limpio y silencioso. Conviene reservar cabina si se viaja en pareja o con niños, y hacerlo con antelación, sobre todo en diciembre. Las cabinas más cómodas (con baño privado) se agotan rápido.

El tren parte de Helsinki hacia las 19:00 y llega a Rovaniemi poco antes de las 7:00. Si no puedes dormir con facilidad, lleva tapones y antifaz: la iluminación de los pasillos permanece tenue toda la noche. Es recomendable llevar algo de comida o bebida, ya que el restaurante cierra temprano y las opciones fuera de horario son limitadas.

El billete se compra en la web de VR.fi, donde también puedes añadir extras como desayuno en la cabina o espacio para transportar un coche. Si planeas recorrer más del norte (hacia Levi, Saariselkä o Inari), llevar vehículo puede ser una buena idea: las carreteras árticas están impecablemente mantenidas incluso en pleno invierno.

Y un dato curioso: el Santa Claus Express también se dirige a Kolari y Kemijärvi, dos destinos menos turísticos, pero ideales para quien busca una experiencia más tranquila o para los amantes del esquí de fondo.

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¿Preparado para conocer la Santa Claus Village? Foto: VR

El lujo de la lentitud

En un país donde todo funciona con precisión, el Santa Claus Express es una excepción encantadora. No es rápido ni especialmente cómodo, pero tiene lo que hace falta para convertir un traslado en un recuerdo. Despertar en el Ártico con una taza de café caliente y con Papá Noel más cerca que nunca, mientras el tren se detiene entre bosques helados, es algo único.

El viaje resume bien el carácter finlandés: austero, eficiente, silencioso y, a su manera, profundamente romántico. Este tren nocturno ofrece algo muy valioso: la posibilidad de mirar por la ventana y ver cómo el mundo se vuelve blanco.

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El hotel paisaje Arctic TreeHouse Hotel. Foto: Arctic TreeHouse Hotel

TURIUM TIPS

No te quedes solo en Santa Claus Village: el verdadero encanto está en los alrededores: bosques, saunas junto al río y excursiones a Ounasvaara.
Visita el mercado cubierto de Rovaniemi: vende productos locales como carne de reno curada y queso leipäjuusto.
Combina el tren con una noche de lujo: el Arctic TreeHouse Hotel o el Glass Resort ofrecen suites con paredes de cristal para ver las auroras boreales desde la cama.