Atenas en un fin de semana: esto es todo lo que tienes que ver - Turium
La ciudad de Atenas como nunca la habías visto. Foto: iStock.

Atenas en un fin de semana: los lugares favoritos de Marie-Chantal Miller, más allá de la Acrópolis

En tan solo 48 horas puedes descubrir una Atenas que va más allá de sus monumentos antiguos: una ciudad dinámica y moderna que te invita a volver una y otra vez. ¡Kalo taxidi! (¡Buen viaje!)

Aleks Gallardo | 6 Feb 2025

Cuando se piensa en Atenas, la primera imagen que viene a la mente es la majestuosa Acrópolis, coronada por el icónico Partenón. Pero la capital griega, una de las ciudades más antiguas del mundo, es mucho más que un enorme museo al aire libre de ruinas antiguas. Al igual que la ciudad de Roma, es una metrópolis dinámica, donde lo antiguo se fusiona con lo moderno. Aquí, los templos del pasado coexisten con cafeterías hipster, tiendas de diseño y una vida nocturna que compite con la de cualquier capital europea. No es de extrañar que Marie-Chantal Miller, esposa del jefe de la casa real griega, tenga sus sitios favoritos en la capital, donde se casará mañana su cuñado Nicolás de Grecia.

Además de por la iglesia de San Nicolás de Rangava, la más antigua de Atenas y donde se celebrará el enlace, se ha podido ver al icono royal de Grecia en el Museo Arqueológico Nacional y el Odeón de Herodes Ático, al que acudió para asistir a un concierto durante la celebración de su último cumpleaños.

Es evidente que, a pesar de su milenaria historia, la capital de Grecia no se ha quedado atrapada en el tiempo. Pasear por sus calles es descubrir un caleidoscopio de experiencias: desde mercados llenos de vida hasta galerías de arte contemporáneo, pasando por restaurantes modernos que reinterpretan la cocina griega con un toque actual. Y todo esto enmarcado por el sol mediterráneo que parece iluminar cada rincón con una luz dorada que invita a explorar, a disfrutar y a perderse en sus encantos.

Así que, si tienes 48 horas para sumergirte en esta fascinante ciudad, aquí te proponemos un itinerario que te llevará más allá de la Acrópolis, a descubrir esos lugares imprescindibles que te harán enamorarte de la Atenas contemporánea. Prepárate para dos días de cultura, gastronomía y diversión en una ciudad que nunca deja de sorprender.

Día 1 en Atenas: explorando lo moderno y lo clásico

Aunque tengas poco tiempo, nunca es mala idea embarcarte en una aventura por una de las ciudades más eclécticas de Europa. Esto es lo que te sugerimos hacer durante el primer día en Atenas:

Mañana: Comienza tu día en el barrio de Plaka

A pocos pasos de la Acrópolis, Plaka es el barrio más antiguo de Atenas, con sus estrechas calles empedradas y casas neoclásicas que te transportan a otra época. Pero no te dejes engañar por su apariencia histórica; Plaka está repleto de tiendas modernas y cafés de moda. Desayuna en Yiasemi, una acogedora cafetería con una terraza que ofrece una vista encantadora del barrio. Pide un café griego y un pastel de espinacas para empezar el día con energía y siéntate en sus escaleras para sentirte como un local. 

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Plaka es el barrio más antiguo de Atenas. Foto: Despina Galani

Mediodía: descubre el Museo de la Acrópolis

La Acrópolis de Atenas es una visita obligada en cualquier visita a la capital griega. Entre las ruinas de esta antigua ciudad que mira por encima del hombro las calles de Atenas destacan maravillas como el Templo de Atenea Niké, construido para celebrar la victoria griega sobre Persia, o el Erecteón, sostenido sobre las figuras de las cariátides.

También el Museo de la Acrópolis es una visita obligada. Este museo ultramoderno alberga una impresionante colección de artefactos encontrados en la Acrópolis. La arquitectura del museo en sí es una obra de arte, con sus amplias ventanas que ofrecen vistas espectaculares de la propia Acrópolis. Además, el museo tiene un excelente restaurante con terraza donde puedes disfrutar de un almuerzo ligero.

Tarde: visita el Centro Cultural de la Fundación Stavros Niarchos

Dirígete hacia el sur de la ciudad para visitar el Centro Cultural de la Fundación Stavros Niarchos, un complejo cultural y educativo que incluye la Ópera Nacional Griega y la Biblioteca Nacional de Grecia. El edificio, diseñado por el arquitecto Renzo Piano, es un ejemplo magnífico de la arquitectura moderna y sostenible. Pasea por los jardines y disfruta de las vistas al mar desde su terraza.

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El Centro Cultural de la Fundación Stavros Niarchos. Foto: Centro Cultural de la Fundación Stavros Niarchos

Noche: cena en Psiri

Para la cena, dirígete al barrio de Psiri, conocido por su vida nocturna (el momento que estabas esperando) y su escena culinaria innovadora. Reserva una mesa en Seychelles, un restaurante que ha ganado popularidad por su enfoque contemporáneo de la cocina griega. Prueba platos como el pulpo a la parrilla con puré de garbanzos o el cerdo asado con puré de manzana. Después de la cena, pasea por las calles de Psiri y disfruta de su animado ambiente nocturno.

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El barrio de Psiri, en Atenas, es conocido por su vida nocturna. Foto: Unsplash

Día 2: del arte a la gastronomía en Atenas

Si en el primer día de tu visita te llevamos por la parte más antigua de la ciudad, en el segundo día te proponemos seguir un itinerario más contemporáneo:

Mañana: arte contemporáneo en el Museo de Arte Contemporáneo de Atenas (EMST)

Empieza tu segundo día con una dosis de arte contemporáneo en el Museo de Arte Contemporáneo de Atenas. Inaugurado en 2000, el Museo de Arte Contemporáneo de Atenas alberga una diversa colección de arte moderno y contemporáneo griego e internacional y está ubicado en una antigua fábrica de cerveza. Las exposiciones temporales son siempre interesantes y reflejan las tendencias actuales del arte global.

Mediodía: un descanso en el Jardín Nacional

Después de una mañana de arte, dirígete al Jardín Nacional, un oasis verde en el corazón de Atenas. Siempre es un placer incluir un gran parque en un itinerario de viaje y este, creado en el siglo XIX, es el lugar perfecto para relajarse y disfrutar de un pícnic. Pasea por sus caminos sombreados, descubre sus pequeños estanques y, si viajas con niños, déjalos disfrutar del pequeño zoológico.

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El Jardín Nacional es un oasis verde en el corazón de Atenas. Foto: Wikimedia Commons

Tarde: compras en el barrio de Kolonaki

Kolonaki es el barrio chic de Atenas, conocido por sus boutiques de lujo, galerías de arte y cafeterías elegantes. Pasa la tarde explorando sus tiendas de diseño y encuentra piezas únicas que llevarte a casa. Si quieres hacer una pequeña parada, no te pierdas The Underdog, una cafetería y microcervecería que sirve los mejores cafés de la ciudad.

Noche: cierre con broche de oro en la azotea de un bar con vistas

Termina tu estancia en Atenas con estilo, disfrutando de un cóctel en una de las muchas terrazas con vistas espectaculares de la ciudad. A for Athens, situado en Monastiraki, ofrece una vista impresionante de la Acrópolis iluminada por la noche. No podrás evitar reflexionar sobre tu experiencia en esta fascinante ciudad, donde lo antiguo y lo nuevo se entrelazan para crear una mezcla única que solo Atenas puede ofrecer.

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Monastiraki es el lugar perfecto para terminar el día en una de sus azotas con vistas. Foto: David Tip

TURIUM TIPS

Vida en el Mercado Central de Atenas (Varvakios Agora): sumérgete en el bullicio del mercado central de Atenas, donde puedes encontrar desde carnes y pescados frescos hasta especias y productos locales. Es un lugar perfecto para experimentar la vida cotidiana de los atenienses y probar algunas delicias griegas.
Disfruta de un espectáculo en el Odeón de Herodes Ático: si tu visita coincide con un evento, no pierdas la oportunidad de ver un concierto o una obra de teatro en este antiguo teatro al aire libre, situado en las laderas de la Acrópolis. La experiencia es inolvidable bajo las estrellas.
Chapuzón en una playa cercana: si tienes tiempo, haz una escapada a las playas de la costa ateniense. Playa Vouliagmeni es una excelente opción con aguas cristalinas.
Sube al Monte Licabeto: este monte ofrece una de las mejores vistas panorámicas de Atenas. Puedes llegar caminando o tomar el funicular, y una vez arriba, disfrutar de un café en el restaurante mientras contemplas la ciudad.